Prácticamente todos los diamantes se someten a una evaluación exhaustiva por parte de un laboratorio gemológico antes de ponerse a la venta. Uno de los aspectos críticos que se evalúan es la claridad del diamante, y los resultados se documentan en un informe de clasificación.
La clasificación de la claridad de un diamante no se limita a determinar su transparencia. Abarca una descripción detallada del tipo, tamaño y cantidad de imperfecciones que presenta la gema. A los diamantes con imperfecciones más grandes o numerosas se les asigna un grado de claridad inferior.
Los grados de claridad se expresan mediante letras, empezando por"Flawless" (F), el más alto, y descendiendo hasta"Included" (I), el más bajo. También hay grados intermedios y algunos con subcategorías numéricas, como SI1 y SI2, en los que un número más alto corresponde a un mayor nivel de claridad.
Prácticamente todos los diamantes se someten a una evaluación exhaustiva en un laboratorio gemológico antes de ponerse a la venta. Uno de los aspectos críticos que se evalúan es la claridad del diamante, y los resultados se documentan en un informe de clasificación.
La clasificación de la claridad de un diamante no se limita a determinar su transparencia. Abarca una descripción detallada del tipo, tamaño y cantidad de imperfecciones que presenta la gema. A los diamantes con imperfecciones más grandes o numerosas se les asigna un grado de claridad inferior.
Los grados de claridad se expresan mediante letras, empezando por "Flawless" (F), el más alto, y descendiendo hasta "Included" (I), el más bajo. También hay grados intermedios y algunos con subcategorías numéricas, como SI1 y SI2, en los que un número más alto corresponde a un mayor nivel de claridad.
¿Qué es un diamante SI2 Lab-Grown?
El grado de claridad SI2 (Ligeramente Incluido) se encuentra en el escalón inferior del grado de claridad del diamante. Es imprescindible comprender que los diamantes SI2 presentan una variabilidad considerable: algunos pueden mostrar más inclusiones aparentes que otros. Sin embargo, encontrar un diamante SI2 que alcance la esquiva condición de"limpio a simple vista", es decir, que no presente imperfecciones perceptibles a simple vista, puede suponer un ahorro considerable en comparación con diamantes de categorías de claridad superiores.
Cuando se busca un diamante SI2, el factor más importante es identificar uno que cumpla el criterio "eye-clean". Para saber qué tipo de inclusiones hay en una piedra, hay que fijarse bien en la tabla de claridad de los certificados de los diamantes. Fíjese en las inclusiones situadas estratégicamente en zonas fácilmente ocultas por el engaste o las garras del anillo.
Con frecuencia, las gemas cultivadas en laboratorio SI2 se caracterizan por una multitud de inclusiones negras prominentes, algunas de las cuales pueden estar visiblemente situadas en el centro mismo de la tabla del diamante. A la hora de evaluar la claridad de un diamante, entran en juego varios elementos, como la cantidad, el tamaño, el relieve, la naturaleza y la ubicación de estas inclusiones. En el caso de los diamantes de claridad SI2, estas inclusiones son bastante evidentes y un graduador experimentado puede distinguirlas fácilmente con un aumento de 10x. Además, si su diamante supera la marca de medio quilate, es muy probable que estas inclusiones sean visibles a simple vista.
El impacto de las inclusiones en el aspecto general de un diamante es considerable, y el tamaño de estas imperfecciones es un factor crítico. Las inclusiones más grandes llaman más la atención, sobre todo cuando contrastan con el color del diamante. Las inclusiones negras, en particular, destacan más que las inclusiones más grandes, transparentes o blancas.
La ubicación de estas inclusiones desempeña un papel fundamental a la hora de determinar la claridad de un diamante. Las inclusiones situadas en el centro de la tabla son las más notables y fáciles de detectar.
En el ámbito de la claridad de los diamantes cultivados en laboratorio, se pueden encontrar diversos tipos de inclusiones, como puntitos, nubes, cristales, agujas, nudos, plumas, hendiduras, líneas de grano internas y maclas. Los defectos superficiales incluyen líneas de pulido, arañazos, naturales, naturales dentados, cavidades, astillas y barbas. Para evaluar la calidad y el aspecto general de una gema es fundamental conocer a fondo estos factores.
Comparación de diamantes cultivados en laboratorio SI1 y SI2
Cuando se trata de la claridad de los diamantes de laboratorio, el contraste entre SI1 y SI2 es bastante distinto. Las piedras SI2 suelen presentar inclusiones más visibles que las SI1. Además, las imperfecciones de los diamantes SI2 tienden a ser más oscuras y evidentes. Esta disparidad en la claridad es precisamente la razón por la que una mayor proporción de diamantes SI1 alcanzan el codiciado estatus de "limpios de ojos"
En general, si busca el mejor valor para una piedra que parece impecable a simple vista en la mayoría de las formas de diamante, los diamantes SI1 son una elección prudente. Sin embargo, no hay que descartar la posibilidad de tropezar con un diamante SI2 "eye-clean", que puede suponer un ahorro considerable, a menudo de cientos de dólares, en comparación con un diamante SI1.
El salto de precio de SI1 a SI2 no es arbitrario, sino que tiene su origen en la prevalencia de las piedras "eye-clean". Los diamantes SI2, por su naturaleza, tienden a presentar defectos más evidentes, lo que los convierte en la opción menos común para quienes buscan un diamante sin imperfecciones perceptibles.
Si la búsqueda de una gema SI2 sin imperfecciones le resulta difícil, merece la pena realizar una inversión adicional para conseguir un diamante SI1 creado en laboratorio. La presencia de imperfecciones evidentes puede restar belleza inherente a un diamante, y estas manchas pueden ser un recuerdo duradero durante toda la vida del anillo de compromiso. Esto subraya la importancia de examinar detenidamente cada diamante para asegurarse de que las imperfecciones no estropean su atractivo visual.
¿Es buena la claridad del diamante cultivado en laboratorio SI2?
El grado de claridad SI2 del diamante puede ser una opción viable, especialmente si el diamante está "limpio a simple vista" El factor clave a evaluar es si las inclusiones son fácilmente visibles a simple vista. Los diamantes SI2 suelen caracterizarse por una mayor presencia de imperfecciones e inclusiones más llamativas en comparación con diamantes con mejores grados de claridad, como SI1 o VS2. Sin embargo, hay casos en los que usted puede encontrar un diamante SI2 que parece libre de defectos notables cuando se ve sin aumento, y esto puede hacer que sea una opción rentable y valiosa.