Guía de compra de diamantes talla pera

Forma

La forma de pera es un híbrido único de las tallas ovalada y redonda, con un contorno ovalado y un extremo puntiagudo. Se considera una de las formas de diamante más caras, ya que llama la atención por su silueta alargada que recuerda a una lágrima. Dos características principales que se tienen en cuenta al elegir un diamante en forma de pera son el porcentaje de profundidad y el tamaño de la tabla. Ambas se expresan como porcentajes en un informe de graduación.

El porcentaje de profundidad es la relación en la que la profundidad física del diamante se divide por su anchura. El porcentaje de profundidad perfecto puede variar según la talla, pero la cifra ideal para una pera oscila entre el 56% y el 66%. Esta medida es absolutamente importante para un diamante de la pera, pues demuestra cómo la luz sería reflejada detrás del interior de la piedra. La profundidad es también crucial para las formas alargadas, tales como pera, debido al efecto del "bowtie".

Ir arriba

Corte

El efecto pajarita es el dibujo gris o negro que recorre la anchura de la piedra desde los bordes hasta el centro de la tabla. Cuanto mayor sea la diferencia entre la longitud y la anchura del diamante, más oscuro será el dibujo. El efecto pajarita es más visible en los diamantes profundos.

Ir arriba

Tabla de diamantes talla pera

El porcentaje de la tabla es la anchura de la tabla del diamante dividida por la anchura de todo el diamante. Para las formas de pera, una cifra comprendida entre el 54% y el 56% se considera excelente. Dado que las proporciones influyen en la cantidad de luz que se refleja y en el brillo de la piedra, hay que prestar atención a estos porcentajes, especialmente en el caso de una forma tan singular como la pera.

ExcelenteMuy buenoBuenaRegularDeficiente
Tabla54% - 64%52% - 66%50% - 68%48%- 70%<50 o >70
Profundidad56% - 66%54% - 72%52% - 71%50%- 74%<50 o >74
Relación L/P1.70-1.551.55-1.451.45-1.351.35-1.25>1.25
FajaMuy fina a ligeramente gruesaMuy delgada a ligeramente gruesaMuy fino a gruesoMuy fino a muy gruesoDe extremadamente fina a extremadamente gruesa

Ir arriba

La talla pera suele tener una superficie mayor en relación con el peso total del diamante, por lo que suele parecer más grande que las formas redonda o cuadrada con el mismo peso. La relación clásica entre longitud y anchura es de 1,55. La mejor opción para alguien que busca una pera alargada es 1,70. Los diamantes con proporciones inferiores a 1,55 o superiores a 1,75 no deben tenerse en cuenta, ya que la forma de pera puede parecer demasiado ancha o tener bordes curvos sin una transición suave hacia la punta de la piedra. La punta afilada también debe protegerse con un buen engaste, ya que es la parte más propensa a astillarse.

Ir arriba

Claridad

Una de las principales ventajas de la talla pera es que oculta muy bien las inclusiones, sobre todo en el borde puntiagudo, donde es casi imposible ver las imperfecciones. Elegir una piedra preciosa con un grado de claridad SI puede ser la mejor opción para evitar pagar de más y seguir obteniendo un diamante precioso. Sin embargo, algunas inclusiones debajo de la tabla se pueden ver a simple vista, incluso si se trata de un diamante de grado VS. Por eso, inspeccionar la piedra en sí sigue siendo una parte crucial del proceso de compra.

Ir arriba

Color

La forma de pera exhibe aún más color que un brillante redondo clásico, porque el color inicial se concentra en el extremo puntiagudo de la piedra. Si el diamante tiene una gran cantidad de tintes amarillos, serán fácilmente visibles incluso a simple vista. Es mejor elegir la piedra preciosa con un grado de color G o superior para asegurarse de que el diamante tendrá un aspecto blanco y limpio.

Ir arriba

Otras formas de diamante